
El alcalde de Pamplona, Enrique Maya, y la concejala delegada de Servicios Sociales, Acción Comunitaria y Deporte, María Caballero, se han reunido esta mañana en la Casa Consistorial con los representantes de la Asociación Motorista PICA, de Protección de la Infancia Contra el Abuso. En el encuentro han participado el presidente de la asociación, Alfredo Belarra, y el vicepresidente, Joseba Martínez.
Esta asociación benéfica sin ánimo de lucro surgió hace más de quince años como respuesta a las situaciones de bullying y abusos que padecen los niños y niñas de la Comunidad foral. Su objetivo principal es la prevención. Para ello, ofrecen charlas y ponencias dirigidas tanto al alumnado como al profesorado de los centros escolares, y organizan diversas actividades de ocio encaminadas a fortalecer la autoestima de los menores acercándoles al mundo de las motos de una manera lúdica. Pero también trabajan en la detección de casos de bullying o acoso, a través del servicio de apoyo psicológico con el que cuenta la asociación. Para estas labores, la entidad cuenta con la colaboración de profesiones del derecho y la psicología.
Una de sus actividades más destacadas es el servicio de acompañamiento para niños y niñas que sufren acoso. En estos casos, un miembro de la asociación, con su moto y su chaqueta de cuero, acompaña al menor al colegio, de forma que se sienten protegidos ante los acosadores. Lo hacen, eso sí, siempre con el consentimiento de los padres y de la mano de la ley, simplemente como una medida disuasoria para los acosadores y como una forma de reforzar la autoestima de los acosados.
PICA Navarra surgió inspirándose en la asociación estadounidense BACA (Bikers Against Children Abuse, Moteros contra el abuso infantil).