Itxasorrobles y elenalecumberri son los dos últimos perfiles de Instagram ganadores de un conjunto de ocho elegidos por sorteo entre quienes han participado en el primer recorrido del año de la Comparsa de Gigantes y Cabezudos de Pamplona, aunque virtual, que se ha cerrado hoy. Desde este domingo los niños ya podrán pasear más allá de Internet, dentro de la regulación del estado de alarma y la situación de confinamiento decretados por el COVID-19.
Hasta 200 dibujos de menores de 3 a 12 años se han ido presentando en estas cuatro semanas a esta iniciativa para emplear el tiempo libre de forma divertida y creativa creada por el Ayuntamiento de Pamplona, dentro de las actividades y propuestas de #ContigoEnTu Casa. En este caso, a través de la red social Instagram se ha desarrollado un certamen no competitivo de carácter artístico y técnica libre para recrear a los personajes más queridos de la ciudad.
Y ciertamente creatividad es lo que se puede apreciar en los trabajos, muchos de ellos recogidos en el sitio web www.pamplona.es/coronavirus/iniciativas/concurso-comparsa. Hay, desde gigantes realizados con rollos de cartón o gomaeva, a Casas Consistoriales construidas con piezas de montaje de juguete, figuras de plastilina o pixel art, composiciones sobre cartulina, zaldikos para colorear, kilikis recortables o, ya dentro del género alimentario, collages hechos con pasta para cocer y figuras de la Comparsa como decoración de cookies caseras.
En esta ocasión los agraciados han sido Enaitz (de 5 años) y Martín y Telmo (de 3 y 1 años respectivamente) que han compartido suerte con Ana Belén, Lucía, Álvaro, Egoi, Anne, Yago y Leyre, todos ellos entre los 4 y los 8 años. Los premios que recibirán: la posibilidad de que los niños y niñas de las familias a las que corresponden los perfiles agraciados puedan fotografiarse con la Comparsa cuando acabe el confinamiento y un lote de productos diversos vinculados sus personajes.
Las bases de participación recogían la cesión al Consistorio del uso de los dibujos, textos, etc., facultándole para establecer los criterios de tratamiento específico para que se pueda realizar su adecuada gestión, preservación y divulgación, ya que formarán parte del Patrimonio documental de la ciudad y serán también, una muestra de lo que los vecinos de la ciudad están haciendo en sus domicilios durante la situación de confinamiento.