La historia y el desarrollo de la ciudad ha llevado a construir una localidad repleta de zonas verdes y árboles, en la que se funden el patrimonio cultural y la naturaleza urbana. Cuenta con numerosas hectáreas de parques y jardines que hacen de ella una ciudad verde e interesantes ejemplares de árboles singulares jalonan sus parques y sus calles. Sus 60.000 árboles y 300 hectáreas de zonas verdes suponen el 15% de la superficie de la ciudad. Sin duda, todo esto contribuye a una mejor calidad de vida, así como al fomento de actividades deportivas, de ocio y relacionadas con el conocimiento del medio ambiente.
El derrumbe de la muralla supuso la expansión de Pamplona y el nacimiento de un nuevo concepto de urbanismo con diseños de jardines como el de la Media Luna y Taconera, de estilo modernista
El Primer Ensanche se desarrolló en torno a la Ciudadela, construcción militar renacentista que se rodea de un cinturón verde que hoy en día se conoce como Vuelta del Castillo
La ciudad se expandió en torno al Camino de Santiago y apostó por la reconversión de espacios industriales en zonas verdes, dando lugar a parques como el de Yamaguchi, de estilo japonés
En los años 80, la recuperación de las riberas de los ríos da origen al Parque Fluvial del Arga, espacio que, unido a los jardines de los campus universitarios, forma un paseo de más de 25 kilómetros