Historia
Antigua calzada romana que unía Augusta Emerita (Mérida) con Asturica Augusta (Astorga), la Vía de la Plata fue el principal eje de comunicación norte-sur de Hispania y, posteriormente, la vía utilizada por los peregrinos de toda Andalucía y Extremadura. Con aproximadamente 700 kilómetros llenos de historia y patrimonio, hoy en día el punto de partida es Sevilla.
Su popularidad aumentó entre los cristianos mozárabes (aquellos que habitaban los territorios musulmanes) cuando, en el siglo X, Almanzor saqueó las campanas y las puertas de la catedral de Santiago y las trasladó hasta la mezquita de Córdoba a lomos de prisioneros cristianos. Posteriormente, la devolución de las campanas y el exitoso avance de las tropas cristianas hacia el sur fomentaron la afluencia de este camino.
INFORMACIÓN PARA EL PEREGRINO
En verano las temperaturas son extremas especialmente en el tramo de Sevilla a Salamanca y no es recomendable hacer este camino entre junio y septiembre. Los meses idóneos son marzo, abril, mayo y octubre.
Aunque más austera que en el Camino Francés, la señalización es buena y las flechas amarillas abundan en todo el recorrido. Además los desniveles son inferiores en comparación con otros caminos y una buena parte de la ruta es ciclable.
Ofrece una buena red de albergues y otros alojamientos.